Las poblaciones mundiales dependen del enfriamiento y la refrigeración para sustentar muchos tipos de procesos de fabricación y producción de energía. El enfriamiento evaporativo ha sido una tecnología transformadora, que ha permitido una producción en masa innovadora y es sustancialmente más eficiente energéticamente que las alternativas. Lo que puede no ser obvio es que el enfriamiento por evaporación también puede ser la opción más eficiente en cuanto a consumo de agua en algunas aplicaciones. El aire acondicionado es la tercera categoría más grande de uso de energía en edificios comerciales, después de la refrigeración y la ventilación. De los métodos disponibles, el enfriamiento por evaporación requiere el menor aporte de energía por unidad de salida de enfriamiento, minimizando efectivamente el uso de combustibles fósiles, la producción de CO2 y los impactos ambientales relacionados. Este artículo examina las realidades ambientales, energéticas y de recursos hídricos al satisfacer las necesidades de refrigeración modernas y analiza la utilización de los recursos.